Especial EL ATRATO VIVE: 22 AÑOS DESPUÉS

22 AÑOS DESPUÉS

Por: Oscar Salazar 
Sobreviviente de la Unión Patriótica, director de Descolpaz

Recuerdo la última vez que dejé mi tierra, tierra de promisión: el gran Urabá, sí, así le decíamos cuando nos referíamos para describirla, allí en ese pedazo de tierra estaba el Chocoano, el cordobés y el antioqueño; y digo mi tierra porque en ella me crié, estudié e hice mi consciencia política desde los trece años. Mi padre llegó a Urabá en 1.965, la carretera era una trocha que sólo llegaba hasta Surrambay, un emporio maderero de la época ubicado cerca de Mutatá, lugar donde se asentaban los arrieros, aserradores y aventureros ávidos de fortuna, pero también llegaron colonos, y desplazados huyendo de la violencia, y todos ellos compartían en esta tierra, se fueron asentando poco a poco, trajeron a sus familias y allegados, y Urabá fue creciendo, hasta hacerse grande y majestuosa, pero también como maldición llegaron las multinacionales, siendo una de ellas el consorcio alemán ALBINGIA, que desde 1909, hacía presencia en Turbo. Ellos llegaron por el golfo de Urabá, hasta puerto cesar, construyeron puerto, vías de comunicación, hasta trajeron un tren, por donde sacaban la fruta de la palma de aceite hasta la empresa y desde ahí hasta el puerto ya convertida en aceite, rumbo a los mercados europeos, fueron los holandeses quienes comenzaron también a sembrar palma aceitera en Urabá, se creó  la firma, AMSTERCOL S.A, más tarde conocida como COLDESA. Para entonces explotaban también paralelamente la TAGUA, una especie nativa ya extinta, conocida como el marfil vegetal, ellos traían desde Holanda su cultura esclavista, dejando  su huella nefasta en Turbo.

Desde 1950 la misión CURIE, había puesto sus ojos en esta tierra, recomendando al gobierno colombiano, que Urabá, estaba predestinada para ser una zona de inversión geoestratégica. Llegaron los empresarios bananeros Mr. MORRIS y Mr. HOOBART, quienes se apoderaron de vastas tierras por el lado de Riogrande, con ellos llega la multinacional FRUTERA DE SEVILLA, la misma  empresa que masacró miles de obreros en el Magdalena, pero ya no como  UNITED  FRIUT COMPANY,  sino  con nombre Colombiano.

Aparecen en el contexto nefastos empresarios colombianos, como, JAIME HENRÍQUEZ GALLO, ÁLVARO URIBE VÉLEZ, ARIAS CARRIZOZA, entre otros. Urabá comienza entonces a tener cierta relevancia política, y emergen nuevas fuerzas políticas que disputarían el poder político a los partidos tradicionales. Surge entonces el Movimiento político de la UNIÓN PATRIÓTICA como producto de las negociaciones de PAZ entre la insurgencia de las FARC-EP y el Gobierno de Belisario Betancourt, y como preámbulo del tránsito de las FARC-EP, hacia la reincorporación a la vida civil. Sueño de paz fue violentamente apagado a tiros, pues la UP fue sometida a un genocidio, más de cinco mil militantes asesinados, crimen de lesa humanidad por la cual el Establecimiento de derecha aún no responde ante la justicia.

Pero ¿por qué se han ensañado tanto los violentos con Urabá? Entre otras cosas por su ubicación estratégica, por sus recursos naturales y minero energéticos, sus grandes megaproyectos agroindustriales y, sobre todo, por la fertilidad de tierras, además de la ubicación de zonas industriales en Riosucio, Acandí, Juradó, Unguía y Bahía Solano, la conexión vial en el Urabá Antioqueño y su ganadería extensiva en el Urabá cordobés. Así se explica el porqué de la violencia generalizada. Hoy de nuevo se abre para esta región una gran expectativa: los diálogos para la terminación del conflicto y una paz estable y duradera, entre las FARC-EP y el Gobierno de Juan Manuel Santos. Existe escepticismo por parte de los habitantes, el que pasará si estos diálogos fracasan una vez más y se frustra la tan anhelada paz con justicia social que espera el pueblo colombiano. Este pueblo sufrido se ha valido de la resistencia como arma para hacer valer sus derechos violentados por un Estado incapaz de ponerse al día con la deuda histórica que tiene con sus comunidades campesina, indígenas, afrocolombianas; por eso el reciente Foro por la Paz y la Reconciliación que se realizó a principios del 2016, en Murindó, reclamó con fuerza al gobierno más inversión social y menos presencia militar en los territorios. Este pueblo que se organiza y levanta para luchar por sus derechos avanza en la conformación de la MESA INTERETNICA POR LA PAZ Y LA RECONCILIACIÓN, como alternativa para hacer que sus peticiones sean escuchadas. Esta tierra de negros, indígenas y mestizos, ya está cansada de mentiras y engaños, se está organizando y continúa en la lucha por la defensa del territorio y sus tradiciones ancestrales…VAMOS ESTE 15 DE JULIO A APOYAR LA PAZ Y LA FIRMA DE  LOS ACUERDOS ENTRE FARC-EP Y EL GOBIERNO.